La celiaquía es la
intolerancia permanente al gluten, conjunto
de proteínas presentes en el trigo, avena, cebada y centeno (TACC) y productos
derivados de estos cuatro cereales. Pueden padecerla tanto niños como adultos. Actualmente,
la incidencia es mayor en mujeres, que en varones.
El
diagnóstico de celiaquía implica un cambio fundamental en la alimentación, ya
que hay que adaptarse a una dieta libre de gluten, en forma permanente, de por
vida. La dieta es el único tratamiento posible.
Los
alimentos que se aconsejan en primer lugar son los frescos, como por ejemplo:
Leche y lácteos
Carnes, pescados, huevos y derivados
Cereales y derivados: Arroz,
maíz, mijo y sorgo. Harinas de arroz, maíz,
almidón de trigo especial para celiacos que llevan incorporado el
símbolo sin gluten
Papas y legumbres, Verduras y hortalizas
Fruta
Alimentos que contienen gluten y
que por lo tanto NO podemos consumir:
Pan y harinas de trigo, avena,
cebada y centeno
Todo lo derivado como masitas, pizzas,
tartas, pastelería en general
Pastas
Sopas cremas
Productos manufacturados en cuya
composición se incluyan las harinas citadas y cualquier tipo de alimento
manufacturado donde no se especifique que “no contiene gluten”
Chocolate, golosinas o helados
(salvo aquellas donde se especifique que no contienen gluten)
Bebidas o infusiones preparadas
con cereales: malta, cerveza
Conservas y todo lo enlatado (salvo que contenga la
especificación libre de gluten)
Fiambres y quesos con especias, saborizados, laminados,
salvo que sean libres de gluten
Es conclusión,
debemos estar atentos, verificar la composición de los alimentos, comprar los
que estén identificados como libres de gluten y en caso de duda no consumirlos
y preferir los alimentos frescos!!!!!!
Post gentileza de Cocina DesTACCada
SANTA FE
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